domingo, 12 de junio de 2011

LA IMPORTANCIA DE SER DOCENTE EN EL PERÚ

Hoy levanté pensando en la importancia que tiene ser docente por la complejidad de la tarea educativa en el Perú y se me ocurre considerar lo siguiente:
Luego de un metódico y organizado estudio de los aportes de Karl R.Popper, Thomas  Kuhn, Irme Lakatos, Paul Feyerabend, Immanuel  Kant , Mario Bunje y  otros maestros de la filosofía de la educación, puedo apreciar en su verdadera dimensión el  extraordinario aporte doctrinario de dichos pensadores.
Agudos pedagogos de categoría mundial, preocupados por optimizar la educación tales como David Ausubel,  Jerome Brunner, Lev Vigotsky y Jean  Piaget  afinaron las principales teorías constructivistas, para que el alumno cree su propio conocimiento con apoyo del docente.
En didáctica es importante relevar a Richard Leblanc con sus diez principios para la enseñanza universitaria, Carlos Monereo con sus diez principios para una enseñanza estratégica o Miguel Zavalza en su obra; competencia del docente universitario, nos dan una visión clara, concreta y precisa de lo complejo que es brindar una buena enseñanza, pues tiene muchas variables.
El esfuerzo filosófico y didáctico llega a puerto cuando se establece la educación por competencias, donde el dominio cognitivo entendido como el saber conocer, el dominio procedimental entendido como el saber hacer y el dominio afectivo entendido como el saber ser se desprende de los cuatro pilares de la educación, a estos habría que agregarles el aprender a vivir juntos.
El esfuerzo individual del docente para minimizar sus deficiencias y elevar sus competencias resulta vital  para el mejoramiento de la calidad educativa del país y garantizar su desarrollo integral.
Paradójicamente se enseña para no pensar, solo para recibir informaciones, para recoger datos o conocimientos elaborados por otros sin exigir el esfuerzo de pensarlos, de reflexionarlos.
No puedo dejar de presentar mi queja contra el profesor aburridor, el que no se conecta con el alumno, los aburridores son torturadores, sería más piadoso matarlos, el aburridor tiene a sus alumnos como si estuvieran en las islas de pascua, no por el aislamiento y la lejanía si no por las caras de piedra que ponen sus confundidos estudiantes.
Porque no tender trampas para lograr su atención, chistes, metáforas, gestos, apostrofes, mímicas, volumen de voz, incluso las indecentes presentaciones de los audiovisuales, no cuestan nada, no requieren presupuesto adicional, solo ingenio y  entusiasmo.
Es tarea del docente impulsar su propio desarrollo, saber enseñar implica una buena organización curricular, actualización permanente y tener amplios y suficientes conocimientos sobre su especialidad y otras materias que se interrelacionen con la carrera, para afrontar con éxito los complejos problemas educativos.
“SOLO LA EDUCACIÓN SALVARÁ AL PERU”

LA PLUMA DE MAX